miércoles, 28 de julio de 2010

Cuestiones prácticas (II)



Estrechas vías
Acrecientan tu vida
No desesperes


Ojalá sea cierto. Para todos aquellos que surcan callejones sombríos en estos momentos y no ven una salida.

martes, 27 de julio de 2010

Cuestiones prácticas


De niños asimilamos conocimientos y tareas que pueden parecer poco prácticas o innecesarias, en la edad adulta entendemos por qué. No recuerdo en qué curso nos enseñaron la escritura de los números, supongo que sería tercero o cuarto de E.G.B. Hoy he preparado unos cheques, correspondían a los finiquitos de unos trabajadores. He revisado las liquidaciones de cada empleado y he escrito las cifras de la indemnización en cada papel rosado. Al escribirlas me asaltaban dudas sobre la norma ortográfica: ¿se escribe “cien mil novecientos noventa euros y cuarenta y tres céntimos”? Estas dudas me han parecido estúpidas y desconsideradas, incluso me avergüenzo al pensarlo. Detrás de ese número y ese papel está el fin de la etapa laboral en una empresa de una persona. En algunos casos, se pone el punto y final a una trayectoria de esfuerzo y serio compromiso con la compañía. ¿Para qué tanto esfuerzo? ¿Para acabar con un cheque en la mano y un futuro incierto? No es fácil salir a la calle a buscar trabajo en un contexto como el actual. No es fácil optar a un puesto de empleo cuando tienes 56 años. No es fácil tener un hijo de dos meses y asumir que no sabes cuándo volverás a trabajar. Mientras tanto, yo, que todavía trabajo, me preguntaba si “treinta y dos” se escribe junto o separado. A veces somos mezquinos sin pretenderlo. 

lunes, 26 de julio de 2010

Tempus fugit

El tiempo pasa rápidamente y trabajando más. Hoy es un día que podré olvidar fácilmente, creo que esto es predicable de casi todos los lunes. Los odio. No asumimos la importancia del presente. A este lunes le seguirán muchos otros, semanas enteras. La vorágine que preside nuestras vidas impide que tomemos consciencia de la realidad. Hoy ya es ayer, mañana ya es hoy, todo es rápido, fugaz, fulminante y efímero. Ray Loriga, refiriéndose a sus años mozos, nos decía con gran acierto hace unas semanas en El País Semanal: " Es curioso, pero en aquel tiempo no era consciente de estar construyendo lo que iba a ser, y ahora que lo sé, ya es tarde... la vida adulta sigue jugando toda clase de buenas y malas pasadas, y estos días de hoy son la construcción de otro futuro al que inevitablemente llegaremos tarde. Y así una y otra vez." No podemos esperar mucho de nuestro futuro, si no nos implicamos en él desde este preciso instante. El mañana se moldea desde el hoy pero es fácil olvidarlo.

domingo, 25 de julio de 2010

Très fatiguée!

No sé cuál será el estado físico de Alberto Contador después de ganar el Tour por tercer año consecutivo o cómo se sentirá Edurne Pasabán al alcanzar la cima del K2 , me imagino que la euforia reducirá la percepción del cansancio. Evidentemente, no soy deportista profesional ni lo pretendo pero sé cómo estoy hoy después de andar durante trece horas ayer y coronar el Aneto: terriblemente cansada. Presento severas agujetas en los cuadriceps y ligeras en los brazos. Extendí mal la crema protectora, mi rostro está blanco pero mi cuello está rojo como un cangrejo, a ver cómo lo cuento mañana en la oficina. No me puse gafas de sol aun cuando las llevaba en la mochila, ayer noche me lloraban los ojos y hoy los tenía irritados tras andar tantas horas mirando la nieve. Al bajar, bebí varias veces agua directamente de un arroyo y hoy presentaba ligeros síntomas de cagalera - perdón por la referencia escatológica pero cierta-. El cansancio ha despertado un marcado mal humor que me ha acompañado todo el día. En conclusión y expresándome en términos coloquiales: estoy hecha una piltrafa.

No puedo ni imaginarme el esfuerzo que hacen algunos deportistas, como el ciclista o la montañista citada, para realizar sus hazañas históricas. Al margen del entrenamiento, dedicación exclusiva a esas prácticas y las renuncias inherentes, debemos añadir la dureza de las competiciones en las que participan. En estos casos de éxito, a parte de las capacidades y la entrega, supongo que debe darse una fuerza mental y una voluntad extraordinaria. Es admirable.

viernes, 23 de julio de 2010

Prisas

Prisa es lo que tengo hoy pero debo cumplir religiosamente con el objetivo impuesto. Son las 14:17 y a las 15:00 me recogen para ir a Benasque.

Simplemente citar una frase que aparece en Ana Karenina, libro que estoy leyendo estos días: "El encanto, la variedad y la belleza de la vida buscan contrastes de luz y de sombra".

jueves, 22 de julio de 2010

Feedback

“Todo sobre mi madre” es una de mis películas favoritas de Pedro Almodóvar. Me encanta la atmósfera que crea en cada una de sus obras, su universo es único e irrepetible. Viéndola compruebo, una vez más, que el arte se nutre del arte, es una retroalimentación constante. En este filme la obra “Un tranvía llamado deseo” de Tenesse Williams cobra un especial relieve. La protagonista, Manuela,  dice que esta obra está ligada indisolublemente a su vida: hace veinte años conoció a su marido al interpretar esa obra en un grupo amateur, veinte años después su hijo es atropellado tras ir a ver esa obra. Las historias de este director son redondas, circulares, tienen un inicio y un final. Desafortunadamente en la vida los ciclos no se cierran siempre.

Hay otros referencias artísticas. Manuela le regala a su hijo el libro “Música para camaleones” de Truman Capote. Le lee el prólogo y aparece la cita emblemática de este autor refiriéndose a la escritura: “ Cuando Dios le entrega a uno un don, también le da un látigo y ese látigo es sólo para autoflagelarse.” Esta escena me subyugó al verla por primera vez. Descubrí a este autor gracias a esta película, primero leí “A sangre fría” y posteriormente, me obsequiaron con este libro de relatos. No corrió la misma suerte la película de Elia Kazan, la dejé a medias ya que no me seducía. Volveré a intentarlo, aunque sólo sea por entender algo más a Huma Rojo y a Manuela y cómo no, disfrutar del mejor Marlon Brando.



miércoles, 21 de julio de 2010

Encuesta de Población Inactiva


Hoy una amiga me ha dicho que felicite a su prima cuando la vea este fin de semana. “Se ha licenciado” me ha dicho. A la luz de los datos arrojados por la Encuesta de Población Activa publicada hoy, no sé si es conveniente felicitarla. La crisis se ceba con un 40% de paro en los jóvenes con edades comprendidas entre 16 y 25 años, sólo Estonia y Lituania registran un porcentaje superior de desempleo juvenil. Esta comparativa me resulta interesante ya que desconozco, como le sucederá a casi todos los lectores, cuál es la situación de la economía en esos países. Presuponemos que se trata de países con una economía débil pero quién sabe, quizás su situación es mejor que la española;  aunque el nivel de paro juvenil, obviamente, es indicativo del buen o mal curso de una economía.

La encuesta aporta datos descorazonadores e incluso, incomprensibles. Señala que la mitad de los españoles con edades comprendidas entre 16 y 35 años tardan doce meses en encontrar un empleo tras finalizar sus estudios. El que acaba de estudiar a los 16 años habrá cursado simplemente la ESO. Evidentmente, la ausencia de formación dificulta el  acceso al mercado laboral. Sin embargo, ¿quién acaba de estudiar a los 35 años? Sólo se lo puede permitir Juantxo (Karra Elejalde) en la película Airbag. En la boda su padre (Carlos Arguiñano) se jacta que el hijo sólo ha tardado ocho años en licenciarse en Derecho. Una situación distinta es la representada por aquellas personas que inician sus  estudios más tarde.  Quizás, algunos que apuestan por esta opción, son aquellos que dejaron los estudios a los dieciséis y luego constataron la crudeza de la realidad laboral. Y, en casi todos estos casos, apostaría a que estas personas estudian y trabajan, es casi insostenible lo contrario, con lo cual los datos de la encuesta se tambalean, esas personas forman parte de la población activa.

Cuando vea a esta amiga el próximo viernes la felicitaré. Sé que ya se ha matriculado en un máster que empieza el próximo septiembre. Bien hecho, la encuesta también dice que se reduce el tiempo en encontrar un empleo cuando mayor es el nivel de formación. Esperemos que no se equivoque.



martes, 20 de julio de 2010

Pies, chicles y clubs


-         Por favor, no me pises los pieses. Estoy harta de las fanes histéricas como tú! No te das cuenta que por mucho que os agolpéis a la salida de los clubes, no saldrán los jugadores antes… Si estás impaciente, vete a ese bar de menuses de enfrente y tómate una tila o dos aníses, a ver si así estás más simpática.
-         Oye, tío, mejor que te hubieses quedado en la parada de autobuses mascando un paquete de chicleses.
-         Cómprate tú los chicleses y trágatelos si quieres. Ojalá te entrasen mil carieses.
-         A ver, si estoy aquí es para ver los cuadríceps y bíceps de Alberto Infiesta.  Tengo todos sus goles gravados en cedéses. No he venido para ver vuestras caras de papanatas, seguro que el día de tu nacimiento se necesitaron varios fórceps para sacar tu cabezón. Si tus orejas parecen dos paréntesises.
-         No me digas, ¿estás aquí para ver a Infiesta? Yo también. Un colega que conoce a su fisioterapeuta, me ha dicho que le han diagnosticado hoy dos peritonitises.
-    Pues que le pongan dos corseses, a lo Escarlata O’hara. Ya te digo yo que se recuperará rápido. Estos médicos deportivos hacen unos análisises un poco precipitados.

Cada vez hablamos y escribimos peor. Este fin de semana bromeábamos sobre el plural de las palabras, algunas arriba recogidas. Nos reíamos pero no hace gracia no estar seguro de la formulación de un plural. Por favor, solicito a quien corresponda una reválida quinquenal a todos los ciudadanos en materia ortográfica. Voy a empezar a repasar la distinción entre hiato y diéresis, no me irá mal.

Recordatorio de la norma ortográfica del plural de las palabras terminadas en s:

P.S.: Me consta que el plural de algunas palabras resulta grotesco pero se trata, básicamente, de un recurso para evidenciar la norma o más bien, su ausencia.

lunes, 19 de julio de 2010

Micropost

Es especialmente complejo tener una idea inspiradora un lunes, más a estas horas. La falta de creatividad agudiza el ingenio y he decidido estrenar una nueva etiqueta: el micropost - seguro que a alguien se le ocurrió antes, que me disculpe, por favor-. Sus rasgos característicos se irán definiendo sobre la marcha pero, básicamente, aprovecharé para opinar sobre alguna noticia de actualidad.

Esta noche pasada han fallecido sesenta personas en un accidente de tren en la India. La tragedia se ha cobrado ciento cincuenta heridos. Francamente, no puedo entender la existencia de recurrentes negligencias de este tipo, no es el primer accidente de tren en ese país de esta década, en el ya adentrado siglo XXI. India es un país en vías de desarrollo, destacando su población por su formación técnica, rica en ingenieros. ¿Cómo puede ser que sean incapaces de coordinar la llegada de un tren a una estación y luego sean capaces de desarrollar microchips? ¿O es que los que compran los microchips no suben en tren? En los últimos años se han sucedido las tragedias de este tipo y el gobierno parece incapaz de gestionar esta crisis. Imperdonable. Muertes gratuitas y fácilmente evitables.

domingo, 18 de julio de 2010

Cañones y libros

Mediodía de un domingo de julio. Cañón de Añisclo. Las paredes abruptas y altas dan cobijo al cauce del río. La sombra de las montañas y la humedad del agua auspician un bosque frondoso. El azaroso trajín del río acompasa nuestros pasos, cada vez más intenso mientras nos aproximamos al palpitar del agua. Exploramos el lugar. Caminamos unas horas deteniéndonos en un sitio y otro. Hace mucho calor, más de treinta grados.

Finalmente llegamos al río. Escogemos cuidadosamente una orilla, buscamos sol y sombra. Nos sumergimos en sus aguas heladas. Chapoteamos y reímos. Charlamos. Organizamos un improvisado picnic, compartimos lo que llevamos: pan de molde, embutido, queso, frutos secos y agua. La felicidad nos aguarda en los momentos más sencillos e inesperados.

Mientras disfruto del momento, pienso que la literatura evoca constantemente la vida. Recuerdo algunos pasajes de "El Jarama", novela en la que se recrea el encuentro en el río de unos amigos un domingo de agosto. Lo leí hace muchos años y decido que ya ha llegado el momento de releerlo. 

El reloj no olvida

El reloj no olvida el 18 de julio de 1936. Hace setenta y cuatro años se produjo la insurrección militar del frente nacional en Melilla, alzamiento que fue secundado con mayor o menor éxito en otros puntos del territorio español. Ese hecho marcó el inicio de una guerra civil que se prolongó durante tres años y se cobró miles de vidas. No voy a pronunciarme sobre ninguno de los bandos, no hay buenos ni malos. Todos mataron, torturaron y se enfrentaron en defensa de una idea. Las ideas se defienden hablando, no empuñando armas. Los soldados rasos, las milicias - entre los que estaban nuestros abuelos - fueron al frente para defender a sus familias, para combatir la miseria, para decir basta, por que en el pueblo todos defendían una bandera o un color y no se cuestionaban los planteamientos del enemigo, por que a su padre lo mató un rojo y entonces no podía dejar de odiarlos a todos e incluso por que creían en una forma de organización política. Unos pocos azuzaron el odio para conseguir el poder, el pueblo dejó prender esa llama mientras esos pocos seguían en sus despachos.

Los motivos hoy no importan, son muchos y yo no puedo ni intuirlos. Sin embargo, creo que determinadas fechas no pueden olvidarse y sobretodo, debe aprenderse de las lecciones que nos da la historia. Recordar no significa anclarse en el pasado sino construir el futuro desde esa experiencia. No podemos olvidar que un país se dividió y se atrincheró tras sus metralletas. No podemos olvidar las muertes de los inocentes, las torturas y las familias rotas que nunca volvieron a ser las mismas. No podemos olvidar a los huérfanos que no conocieron a sus padres. A los políticos , intelectuales y artistas que fueron ejecutados ni a aquellos que tuvieron que exiliarse. No podemos olvidar la dictadura que siguió a esa guerra civil durante cuarenta años ni la falta de libertades y derecho que la definió. No podemos olvidar. Y por que no podemos olvidar se promulgó una Ley de la Memoria Histórica. Pero las heridas siguen abiertas. Mientras tanto, vemos cómo algunos poderosos mueven los hilos para que inhabiliten a los jueces que hurgan en esos episodios y nos dicen que ha pasado mucho tiempo, nos instan a que olvidemos. No lo haremos.

viernes, 16 de julio de 2010

Empieza la maratón

Hoy es dieciséis de julio y empieza la maratón, lo he decidido. ¿Qué maratón ? No me refiero a la del Corte Inglés sino a la del Café de Flore, la inauguro hoy. Intentaré escribir una entrada diaria, harto complicado, hasta el seis de agosto, día en que empiezan mis vacaciones.
Llevo un mes sin escribir en el blog y en menos de cuatro semanas me iré de vacaciones. Si continúo alimentando esta senda de abulia escrita, es preferible dar de baja el blog, hay que asumirlo. Por lo tanto, voy a intentar revitalizarlo con una entrada diaria. Quizás fracase en el intento o quizás no. Este peregrino proyecto se enfrenta ya a dos serios contratiempos : este fin de semana y el que viene me voy a la Valle de Ordesa a hacer montañismo. No tengo ni IPAD ni PDA ni Blackberry ni Internet en el móvil y gracias a Dios, tampoco espero que en el refugio haya ninguna conexión– no creo que haya ni cobertura para el móvil -. Afortunadamente todavía quedan algunos parajes inmunes a este frenesí tecnológico. Estos lapsos de incomunicación los recuperaré en los siguientes días, es decir, el domingo escribiré la entrada del sábado y el domingo.

Espero no incurrir en la descripción de lo cotidiano y anodino, ¿será fácil introducir un apunte cada día, incluso después de una jornada infernal o bien cuando el calor aprieta hasta lo indecible ? Ya lo veremos. Veintiún días, veintiuna entradas. De momento ya tengo dos : la de la inauguración y la de la clausura, sólo me quedan diecinueve. En todo caso, siempre puedo empezar a cultivar los haikus. Empecemos citando uno con imágenes « montañeras » :
El sendero del paraíso
Está pavimentado con brillantes
Pétalos de ciruelo.

(de Masumi Kato)